‘Hijos agresores jamás alcanzarán el perdón divino’

Los hijos y las hijas no tienen ningún derecho de golpear ni asesinar a una madre, porque es el ser que les dio la vida y quien lo hizo jamás alcanzará el perdón divino y será juzgado por Dios.

Es lo que dijeron en entrevista por separado dos grandes mujeres emprendedoras, que sacaron adelante a sus hijos ellas solas; una vendiendo carne de Chinameca y la otra orientando vidas, porque dice tener el don de la videncia.

DOÑA ELVITA, UN ÍCONO DE
LA MUJER TRABAJADORA

Elva Román Hernández, de 57 años de edad, mujer de las lenguas zoque-popolucas, quien tiene seis hijos y 12 nietos, originaria de Sayula de Alemán, comenzó a vender carne de Chinameca desde los 13 años de edad con su mamá, en el callejón Fernández del centro de Minatitlán, y de ahí con mucho esfuerzo, trabajo y dedicación, logró sacar adelante a la familia “con la ayuda de Dios”.

Convertida en toda una matriarca, ahora se dedica a predicar la palabra de Dios casa por casa, porque les dejó el negocio a sus hijos y solamente viene ocasionalmente a Minatitlán para saludar a sus clientas.

Este 10 de mayo, “Elvita” como todo mundo la conoce, regaló tamales y atole a todas sus clientas, a las que frecuentemente le compran un kilo de carne y longaniza.

DOÑA PAU Y SU INCREÍBLE
“DON DE LA SANACIÓN”

Por otro lado, en Ixhuatlán del Sureste se encuentra la poderosa vidente Paulina González Martínez, de 57 años de edad, originaria de la Sierra de Santa Martha y madre de cinco hijos, diez nietos, con bisnietos.

“Doña Pau” como todo  mundo la conoce, tiene el don de la videncia y sanación de las personas; aunque dijo que enviudó muy joven y comenzó a sacar adelante a sus hijos vendiendo verduras por las calles en canastas.

Sin embargo, su don espiritual que descubrió cuando era una niña, la llevó a instalar una mesa de trabajo, donde a través de los años, se convirtió en una famosa curandera que predice el futuro.

“Un hijo, cuando asesina a su madre a golpes o  la mata con lo que sea, así le pida perdón a Dios de rodillas, jamás lo alcanzará, porque le quitó la vida al ser que lo llevó en el vientre, la mujer que le dio la vida”. Fue dura y tajante con sus palabras.

Siguió diciendo claro y conciso “además un hijo que asesina a su madre nunca se arrepiente de lo que hizo, porque quizá su misma madre lo mal educó y no fue porque se le metió el Diablo, como dicen luego; sino por las drogas”.

RECUERDAN A MARÍA DEL PILAR

Se recordará, que el 24 de diciembre de 2022, en Minatitlán, fue asesinada a balazos, calcinada y tirada a la basura por su propio hijo, la trabajadora petrolera María del Pilar Pineda, ahí mismo en el callejón Fernández, donde tiene su puesto de carne de Chinameca Doña Elvita.

Ella desapareció en plena Noche Buena y días después en la madrugada la encontraron muerta y calcinada tirada en el basurero de Las Matas.

Estaba depositada dentro del receptáculo del camión recolector,  hasta donde la habría transportado el mismo vehículo, luego que su hijo, ya preso en el penal de Coatzacoalcos, la tiró envuelta entre sábanas y bolsas de basura.

La policía ministerial cateó el departamento abandonado, que es propiedad del esposo de la víctima, donde su hijo  vivía y fue detenido en la terminal del ADO intentando escapar de la justicia; el móvil del crimen fue por temas de la herencia.

Alfredo Estrella
Minatitlán