La Delegación de Tránsito número ocho, pintó los cajones donde se deben estacionar los motociclistas, sobre la avenida Hidalgo, frente a la tienda “Coppel” y delimitó el área donde hacen fila los taxistas, que llegan a dejar y a recoger gente en el centro de la ciudad.
Llegaron hasta el delegado de Tránsito, Jesús Fernández Céspedes, las quejas ciudadanas sobre el caos vial que se forma todos los días en horas pico en avenida Hidalgo, desde la calle José Arenas, hasta la calle 5 de Febrero, sobre todo frente a dicha tienda departamental donde los taxistas impiden que se estacionen los vehículos particulares, y estos a su vez les tapan el paso a los motociclistas que quieren salir y no los dejan.
TODO EL MUNDO HACE LO
QUE SE LE DA LA GANA
En ese pequeño espacio como de cien metros, se hacen maniobras de todo tipo, porque los comerciantes informales venden sobre la banqueta impidiendo el paso a transeúntes.
Las personas que piden limosna se ponen a bailar frente a la puerta de entrada de la tienda y los empleados ahí mismo sacan los muebles y las motos que venden, para subir el producto final a los vehículos que van a hacer el flete al cliente.
Los motociclistas llegan por docenas durante el día, sin encontrar lugar para estacionarse, porque la mayoría de los empleados de la tienda llegan al trabajo en motocicleta y “Coppel”, no tiene estacionamiento propio.
Los taxistas reclaman su espacio que para ellos fue asignado, aunque a veces lo hacen con actitud prepotente, debido a que los clientes que llegan al cajero, se estacionan en doble fila sin importar si el taxista o los motociclistas van a poder salir.
Alfredo Estrella
Minatitlán