Se casó la princesa Mako de Japón, quien renunció a su título por amor; contrajo nupcias con Kei Komuro, su novio abogado.
Luego de haber anunciado su compromiso hace cuatro años la pareja de enamorados se unió finalmente pese a una fuerte polémica.
Mako conoció a quien se convirtió en su esposo cuando cursaba sus estudios en la Universidad Cristiana de Tokyo.
La boda había sido pospuesta por supuestas inmadureces y una disputa financiera por parte de la madre del novio.
Finalmente, al casarse con un plebeyo y como estipula la ley, Mako abandonó la familia imperial nipona y pasó a llamarse Mako Komuro.
Agencias/CDMX