Marginación golpea a cuatro comunidades de Mecayapan

Llegar a esta zona es un verdadero reto, ya que sus caminos están destrozados e intransitables; suplican intervención del gobierno del estado para ser rehabilitado.

De las 16 comunidades que comprende la demarcación del municipio de Mecayapan, cinco de ellos son las que están más marginados, puesto que estas comunidades se ubican a más de dos horas y media de la cabecera municipal.

Son Los Arrecifes, Vicente Guerrero, la Nueva Esperanza, El Salado y el Paraíso, en donde la población carece de diversos servicios, principalmente las vías de comunicación que están prácticamente destrozados.

TODO UN RETO PARA LLEGAR

Este reportero se dio el tiempo de recorrer esta zona, del cual se convirtió en todo un reto, puesto que la única forma de llegar es a caballo, caminando o mediante una camioneta todo terreno, ya que la única vía de acceso a esta zona es un camino de terracería, con piedras enormes que impiden el paso de cualquier vehículo compacto.

Después de una hora de salir de Tatahuicapan de Juárez, se llega a la comunidad de los Arrecifes, posteriormente se inicia una travesía hacia la zona más alta de Mecayapan, en donde el zangoloteo de los carros era inminente, el patinar de la camioneta era inevitable, ya que las enormes piedras, los hoyancos en el camino de terracería, era una tras otra hasta llegar al destino.

Luego de 40 minutos se llega a la primera comunidad denominado; Vicente Guerrero, una comunidad no mayor a los 180 habitantes, que únicamente cuanta con un preescolar, una primaria y una telesecundaria, en donde es visible la carencia que viven estas familias ante la falta de servicios.

REHABILITACIÓN DEL CAMINO

Aquí platicamos con el señor Flavio Varela, quien señalo que el camino de comunica de Arrecifes a Vicente Guerrero llevas más de diez años que no se le ha dado mantenimiento, a pesar de comunicar a varias comunidades.

“Nos tienen abandonados, queremos que nos ayuden principalmente del camino que está en la ruina, intransitable, nadie ha volteado a ver estas comunidades, a pesar de que hemos insistido que nos rehabiliten nuestro camino que son nueve kilómetros” apunto el entrevistado.

TRANSPORTAN SU MERCANCÍA A CABALLO

Don Flavio siguió: “Batallamos demasiado, en estos tiempos de seca, sí hay posibilidades de salir, pero en tiempo de lluvia batallamos bastante, tenemos que acarrear nuestros productos de la canasta básica a caballo, porque el camión que surte la tienda DICONSA no puede llegar hasta estas comunidades y nosotros tenemos que acarrear los productos a caballo.

EL PARAÍSO, OTRA COMUNIDAD EN ABANDONO

A unos 40 minutos más se encuentra El Paraíso, una comunidad no mayor a cien habitantes, en este lugar los pobladores se sienten abandonados, ya que ni los programas sociales del gobierno federal han podido llegar ahí, aunado a ello, tratan de subsistir con lo poco que producen del campo.

MEDIANTE FAENAS TRATAN DE REHABILITAR EL CAMINO

Ante la falta de apoyo del gobierno, han optado con unirse para tratar de mantener por lo menos su vía de acceso mediante faenas, como lo señala José Aguilar, uno de los pobladores de esta comunidad.

“Nosotros nos hemos organizado para habilitar por lo menos el paso de las unidades para poder salir y eso lo hacemos con pala y pico cada semana mediante faenas”, apuntó.

DIFÍCIL ACCESO A LA EDUCACIÓN

Rubén Hernandez Andrade y José Zamora González, ambos habitantes de la comunidad de la Nueva Esperanza, relatan que es un verdadero lujo para que los niños estudien, ya que los propios padres de familia se han comprometido para ir a buscar a los maestros que imparten clases en este lugar.

“Nosotros como padres de familia nos organizamos para ir por los maestros hasta Los Arrecifes y lo hacemos con motocicletas, ya que es la única forma de mover a los maestros, todos los lunes desde muy temprano recorremos más de una hora para ir a buscar a los maestros que dan clases en el preescolar y la primaria, para posteriormente ir a dejar al mismo lugar los fines de semana” dijo uno de ellos.

Señalan que en varias ocasiones los docentes se han lesionado por las caídas que llevan en las motocicletas, toda vez que en temporada de lluvias los caminos de terracería y las piedras hacen intransitables a esta zona.

IMPLORAN EL APOYO DE LA 4T

Don Rubén, a sus 70 años suplica a las autoridades estatales o federales a voltear a ver a estas comunidades, que por años han sido olvidadas.

“Mi mayor deseo por lo menos es ver tener un camino digno para que nuestros hijos puedan salir sin ningún problema” afirma.

Por lo que dijo, no perder la esperanza con los gobiernos de la 4T, que van atender este problema del camino, que ha sido un verdadero dolor de cabeza para estas cuatro comunidades de Mecayapan.

Apolonio Martínez

Mecayapan